Las lunas llenas con el arquetipo de la madre, esa madre adulta gestante y que acoge. Esa energía que a veces necesitamos las mamás para descansar del maternaje.
Y si le sumamos la energía de cáncer, tenemos una energía maternal sensible, protectora y profunda.
Qué podemos trabajar esta noche con esta energía?
● Nuestro vínculo materno.
● Nuestro ser madre.
● Nuestras ganas de ser madre (si estamos con demoras en gestar es ideal para preguntarnos cómo nos vemos maternando, qué emociones nos embargan, qué energía queremos maternar que luego se transformará en un ser).
● Nuestra manera de ver a otras madres y la energía de nuestra Diosa Madre.
Cómo lo vamos a hacer?
Puede ser en ritual, en meditación o un poco de ambas.
Depende de lo que vayas a trabajar.
A continuación te dejo dos meditaciones/rituales para aprovechar al máximo esta energía.
? Sanarnos, sanar nuestra maternidad, sanar nuestra madre (aunque ya no esté en este plano) son actos de psicomagia pura para nuestra evolución. Para seguir este viaje más livianas!!
Para sanar nuestro vínculo con nuestra madre y mí maternidad
Vas a necesitar:
● Una vela rosa.
● Un cuarzo rosa o cuarzo cristal
● Incienso de rosas
Busca una postura cómoda. Enciende la vela y el sahumerio. Coloca el cristal a la altura de tu pecho.
Comienza a relajarte. Usa la técnica que más te guste (de 10 a 1 relajando y visualizando cada parte de tu cuerpo es muy efectiva).
Visualiza un momento con tu madre que te haya generado dolor, que sientas en esa niña herida interior y vas a llenar de luz esa escena. En esta parte siéntete libre de modificar el «guión»: qué cosas te hubiera gustado escuchar, qué herramientas crees que le faltó a tu mamá (autoamor, autocuidado, etc).
Coloca esa imagen a la altura de tu pecho y vas a decir en voz alta: «te abrazo y te perdono mamá, gracias por ser la madre que fuiste (o sos)».
Te vas a quedar sintiendo la energía del cristal y de la imagen integrándose en tu ser, siendo parte de tus nuevas memorias.
Ahora vas a «revisar» tu niña interior y le vas a dar todo tu amor de madre adulta. Siente esa unión, esa energía reparando y sanando. Un plan mayor de almas que se conjugaron para que seas la mujer que eres hoy y la madre que quieres ser.
Cuando te sientas lista vuelve al aquí y ahora. Cada vez que necesites sentir esa energía rosa maternal para cuidarte y abrazarte coloca el cristal a la altura de tu pecho. Hay una madre hermosa y amorosa que nos sostiene a todas y esta noche brillará con todo su amor y protección.
Te abrazo!
Si estás buscando activar tu fertilidad para ser madre vas hacer este ritual/meditación
Necesitas
● Una vela rosa o lavanda
● Sahumerio de rosas o jazmín
● Una semilla de calabaza o la que quieras
● Un cristal rosa o piedra de la luna
Enciende la vela y el sahumerio. Busca una postura cómoda y coloca la semilla a la altura de tu útero y el cristal a la altura de tu pecho.
Comienza a relajarte (ideal contar de 10 a 1 visualizando cómo cada órgano se relaja y se funde en una sensación agradable).
Visualizate en un espacio abierto, un paisaje sagrado y visualiza esta luna llena enorme sobre ti.
Siente su energía, su luz sobre cada parte de tu cuerpo. Visualiza cómo un haz de luz plata baja de ella y se posa en tu semilla (que tienes a la altura de tu útero). Esta semilla comienza a vibrar en sintonía la energía de este rayo y va ingresando en tu cuerpo. Poco a poco toda esta luz plata va colmando tu cuerpo de bendición lunar.
Vas a pedir este deseo y llevar el cristal a la altura de tu pecho. Siente la confianza de la escucha de esta Diosa Lunar y la energía del Universo trabajando para que tu deseo sea real. Agradece. Siente en todo tu ser que ya está siendo.
Poco a poco vuelve al aquí y ahora.
Hace un tiempo que acompaño mujeres a quienes les cuesta concebir y entonces entiendo mi propia historia, cómo trabajé y sané mi cuerpo y mis limitaciones mentales para concebir. Para sentirme fértil. Conozco esa emoción de cuando llega la menstruación una vez más, cuándo las mujeres a tu alrededor van quedando embarazada y vos no, esa sensación que recorre el cuerpo.
Hoy estoy del otro lado con esta linterna de luz, amor y empatía para decirte que sí se puede, que confíes en tu cuerpo sano y que aquí estoy para caminar contigo este proceso.
Siente que está siendo! Siente la bendición!
Te abrazo! Noe